Querida Amiga, compañera,
Mariposa
La
vida tiene esas cosas raras de dar y quitar. Queremos volver a ser niñas y
soñar. Revolotear sin miedos, sin penas. Pero vivimos el aquí y el ahora, estamos
presentes, para dar fe que fuiste el mejor regalo y para enterarnos de tu
partida. Pero, también sabemos que el
amor te hizo ligera y que tu energía cósmica
danzara siempreterna por los pasillos liceanos.
La
maestra vida nos regaló tu presencia, caminando muchos senderos unidas,
fortaleciendo esos lazos invisibles de hermandad y aunque a veces nos perdimos
en los caminos de la existencia, siempre nos recordábamos de todas y cada una,
hasta que llegó el momento de volver a reunirnos en los miércoles de mariposas.
Un
espacio de reencuentro, de sanación, de aprendizaje, de escuchar y escucharnos,
de querernos y aceptarnos, cada una en su diversidad.
Hoy
nos reunimos para pedir al universo que el eterno sol te acoja, que el amor te
rodee y tu luz pura guie tu camino de regreso a la casa del Padre.
Pedir
al universo que tu amor ilumine con luz sanadora el camino de tus amados hijos, nieto y a Ricardo,
compañero de la vida.
Nosotras,
tus compañeras, seguiremos reuniéndonos cada miércoles a seguir gozando de tu
energía amorosa y de los recuerdos hermosos que nos dejaste.
Para
terminar, un regalo del maestro Rumi
“Las
despedidas son solo para aquellos que aman con sus ojos, porque para los que
aman con el corazón y el alma, no existe tal cosa como la separación”
Eternamente
en nuestros corazones, tus aladas mariposas.
Iquique,
mayo 27 del 2019